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FIC ALMAS REBELDES : CAPITULO XXII NAVIDAD ENTRE RUINAS II PARTE

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Mensaje por Brujita Alex Dom Sep 30, 2012 12:01 am

CAPITULO XXII

NAVIDAD…ENTRE RUINAS…

Al terminar la transmisión, Maryland los llamó para cenar… cenarían temprano, con lo poco que se pudo conseguir… que para ellas era abundancia tal como estaban las cosas en ese momento, había un dulce de navidad, pavo, jamón, rosca de pan de huevo, una bandeja de arroz con pollo, y tamales. También ron ponche, vino, y una botella de champaña, cortesía del almirante Mc Allister. En otra mesa los regalos que recibirían de parte de los jefes, del alto mando del Comando Sur y los que recibirían en intercambio… Daniela se esmeró para cocinar una cena deliciosa, a pesar del gran dolor que contristaba su espíritu en ese momento.
-Brindemos por la primera navidad en libertad y democracia… aunque esa libertad haya cobrado tan alto tributo… mantengan viva la llama de la esperanza… que por duras que sean las pruebas, siempre habrá una mano amiga, una circunstancia afortunada, un ángel en el camino para recordarnos que ese que hace dos mil años que nació en Belén, esta presente en las vidas de cada uno de nosotros… Salud…!!!
Chocaron copas… entre lágrimas de dolor… ya que por mucha abundancia que hubiera… en sus corazones habría luto perpetuo por aquellos seres queridos que las precedieron en la marcha hacia…lo incógnito…
Terrence al brindar con Claudia, la miró con provocación, como si quisiera prepararla para la noche que tendrían… Al igual que Carla… con Heini… y los demás que brindaron con sus copas enlazadas… era evidente e inequívoca la intención de ese brindis. No había necesidad de palabras, esa noche Cupido cobraría su tributo.
Luego de recibir sus regalos, se fueron retirando a sus habitaciones…Cada una a enfrentarse al amor en su forma más hermosa, tierna y significativa.
Claudia miró la caja que estaba en el centro de la cama… suspiró, abriéndola puso el conjunto sobre la cama, y se fue a duchar para perfumarse y ponerse aquella prenda seductora.
Luego de una ducha larga y aromática, ponerse una crema perfumada y colonia de baño, se puso el conjunto y se miró al espejo. La imagen que le devolvió no era la que realmente tenia de ella…era la imagen de una mujer joven, vibrante, sexy, sensual… segura de las pasiones que provocaba y como satisfacerlas… muy distinta a lo que realmente era ella
Unos toques en la puerta la devolvieron a la realidad… era Terrence, que llamaba a la puerta de su habitación… abrió… Llevaba una bata azul marino de terciopelo, casi negra, que realzaba su natural elegancia y apostura… un pecho fuerte, que hizo que su corazón latiera apresurado…Un escalofrío de miedo la envolvió… Iba a entregarle lo más preciado en una mujer… su virginidad…
-Estas hermosa… no me equivoque al elegir este conjunto…-ella sintió como sus brazos la rodearon, pegándola a su cuerpo viril y fuerte… en el cual sobresalía una erección fuerte y ardiente….
Por su mente pasaron muchas imágenes, todas de dolor y crueldad, tanto física como psicológica… si lo rechazaba, su vida no tendría cambio alguno… El recuerdo de la Navidad de 1987 que la hizo abandonar su casa, para no volver jamás, descubrir que su padre como siempre usaba la fecha de navidad, para obsequiarle no juguetes sino una tunda de correazos, como siempre, acumulaba todas sus faltas para hacer esto en la fecha más entrañable, pero esta tenia un regalo especial… estaba dispuesto a convertirla en su mujer, a ciencia y paciencia de la madre de la chica…como ésta no podía atenderlo, pretendía convertirse en el marido de la hija… un sacrilegio, un pecado contra natura, esa tarde huyó solo con lo puesto… y se refugió en casa de una amiga que conocía a Maryland Ainsworth, y el resto… fue historia…
-Estás temblando… -dijo al notar que se estremecía… -¿Tienes miedo?
-Si, es mi primera vez…
-O estas recordando cosas dolorosas- dijo levantando mi barbilla y mirando sus ojos llenos de lágrimas… -Yo estoy aquí para que los olvides… o para que si los recuerdas, no te hagan tanto daño…
Claudia metió sus brazos dentro de la bata, abrazando su tibia piel… sintió como respiraba profundamente… y dejó que la apretara contra su cuerpo excitado y ardiente…
-Quítame la bata… ahora- dijo roncamente…
Se la quitó, dejando al descubierto un cuerpo hermosamente masculino, digno de ser modelo para una escultura de Michelangelo… Le recordaba al David… ella sintió como la despojaba de aquella fina prenda intima, que cubría un cuerpo no tan perfecto… al menos, eso pensaba ella. Sintió como sus manos la acariciaban con suavidad, su erección presionando contra su sexo…
-Claudia… - gemía sensual y virilmente… -Quiero amarte… me estoy muriendo por ti…
Ella buscó sus labios, enroscando su cuerpo en el de él… no estaba muy segura de lo que estaba haciendo, solo estaba consciente del vacío en la boca de su estómago, igual al de su vientre y al de su corazón… tenia hambre de cariño… hambre de caricias…hambre de él…
La cargó como a una niña… y la puso en la cama, cubriéndola tiernamente con la sabana y el cobertor y metiéndose a su lado… sus manos, hambrientas, silenciosas, la acariciaban suavemente, sin prisas… y sus labios se acercaban con suavidad a los de ella… tomaba sus manos para que lo acariciaran… sobre todo su pecho y su sexo…
-Terry…
-Claudia… voy a enseñarte a amar…
Sus labios buscaron los suyos… sintió como su cuerpo tibio, cubierto de una piel suave, aterciopelada… se fundía con el suyo… Sentía sus manos, perdiéndose en su piel, en su busto, haciéndola vibrar, se sentía mujer en sus brazos…
-Terry… te necesito… ayúdame a olvidar… -gimió con voz entrecortada…
-Para eso…- gimió sensualmente, besando su cuello- estoy aquí…
Lo sentía… sensual, apasionado… y no podía evitar responder a todo lo que hacia… sentía su cuerpo amoldarse al de ella… La enloquecía su aroma, tan viril y personal…
-Claudia… suspiraba…
Ella solo se quejaba… sentía como su erección penetraba su cuerpo, llenándola con su tamaño… Era enorme…y ardiente…
-Te amo, Claudia…-gemía virilmente al sentirse rodeado por sus tejidos húmedos y calientes… - te amo… te he deseado tanto…
Sus labios empezaron a acariciar sus senos… se estremeció… se sentía mujer, sensual, apasionada, quería sentirlo más dentro de ella…
-Rózame mas fuerte… por favor… -gimió con una voz que no parecía ser su voz…
Lo sintió tomar una generosa bocanada de aire antes de rozarla fuerte y lentamente… se estremeció entre sus brazos… clavó sus dedos en su espalda y sintió como la espalda de él se arqueaba y lo sentía gemir virilmente de nuevo…
-Claudia…
Se estrechó contra él… sintió sus senos apretados contra su pecho… ardorosos, sensibles al extremo… su piel la acariciaba con su sedosidad y suavidad… se sentía ardiente, húmeda, desesperada…
-Terry… rózame fuerte… quiero sentirte mucho….
Todo lo que ella le pedía, lo hacía… el placer los inundaba a ambos… lo acariciaba con suavidad… en ese momento…sintió como su erección explotaba dentro de su cuerpo… sembrando en ella el regalo de la vida…
-Gracias… por dejarme curar tus heridas… -gimió agitado… - gracias por ese regalo tan bello… te amo…
Un beso sensual, apasionado cubrió sus labios… al que respondió… fue la noche más hermosa e inolvidable de su vida…y sus consecuencias, no se harían esperar.
Carla y Heini se retiraron discretamente… Carla fue a su habitación y entro al baño a cambiarse, se miró al espejo… la imagen fue de una mujer atractiva, sexy, asustada… asustada por lo que iba a hacer. Pero no podía echarse atrás… ya había dado el primer paso…
Heini la esperaba, ataviado con una bata de baño, blanca, de satén… que le había regalado Wilhemina… Estaba sensual y sexy… y lo sabía… se puso unas gotas de Náutica… la colonia que ella le había regalado la Navidad pasada. Se había afeitado y colocado after shave… para suavizar la piel de su rostro… quería que se sintiera amada, deseada…
Escuché toques tímidos en la puerta de su habitación… era Carla… abrió la puerta… y la vio… estaba encantadora con lo que le había regalado… lo miraba con timidez… y a la vez curiosidad por saber que había tras la bata…
-Estás hermosa… - dijo mirándola de arriba abajo… -muy hermosa… no me equivoque al escoger ese baby doll.
La hizo entrar a su habitación… ella miró la cama con temor… y yo me puse frente a ella… tenia la bata abierta… insinuaba, sin dejar ver su pecho, y otras partes de su cuerpo…
-Carla… te deseo tanto…- dijo con voz ronca…
Carla lo miró… y valientemente deslizó la bata de sus hombros, descubriendo su desnudez, su sexo erecto y ansioso por sentirla… Sus ojos se llenaron de lágrimas… y el se dio cuenta que estaba recordando la muerte de su madre… y que lo había perdido todo…
Carla lo abrazó… sus manos, tibias, suaves, sedosas se deslizaron por su espalda y tomaron sus glúteos… los cuales apretó suavemente… una maniobra atrevida que lo excitó más… sintió sus labios, inexpertos e inocentes prensarse a los suyos… en un beso lleno de angustia, tristeza… y quizás miedo.
Lo que siguió luego lo dejó sorprendido, su inocente amante lo estaba besando de un modo que lo derritió por dentro… sintió una lengua suave, cálida, con gusto a champaña… acariciar su boca por dentro… el correspondió deslizando la suya dentro de su boca… haciéndola vibrar en sus brazos…
-Carla… me has besado…-suspiró.
-¿Te gustó?- dijo sorprendida- Creí que lo estaba haciendo mal…
Heini no respondió, deslizó los tirantes del camisón, y este cayó a sus pies… aquel cuerpo que tenia frente a él era un cuerpo tierno, hermoso, y virgen… La atrajo hacia él con ternura…
-Liebchen… quiero hacerte el amor… Quiero amar tu cuerpo y poseer tu alma… quiero que seas para mí… solo para mí…
Carla lo abrazó… acarició su espalda y su cuerpo se acopló totalmente al de ella… la sintió… tan cálida… tan tierna… y la cargó… como si fuera una niña fatigada…
La puso en la cama, la metió entre las sábanas y subíó el cobertor… la miró tiernamente y se metió junto a ella…
La abrazó tiernamente, aunque con firmeza apretándola contra su cuerpo, aquella firmeza amenazaba con derramarse antes de que la tuviera unida a él… así que la acarició suavemente… para prepararla…
Se besaron suavemente… y el acariciaba todo su cuerpo, con calma… y ella se incorporó para mirarlo…
-Me gustaría… tocarte….
-Hazlo… liebchen… soy todo tuyo…
Lo acarició suavemente…nada se escapó a sus manos que lo tocaban con suavidad, como si quisiera grabar en sus manos el tacto de su piel… al sentir aquellas manos en su sexo casi creyó alcanzar el orgasmo… su respiración se aceleró…
-Si sigues así… no aguantaré…
Al terminar de acariciarlo… ella se acercó a su cuerpo, subió el edredón y se pegó a él… su calor lo excitó más… fue ese el momento en que la puso bajo su cuerpo… y empezó a penetrarla con cuidado y suavidad… sentía su sexo rodeado de humedad, calor y sedosidad…
-Me duele… .gimió.
-Tranquila… pasará pronto…- la beso sensualmente en el cuello…
Por fin, la sintió, calida, sedosa… húmeda… y empezó a embestir suave y lentamente… le besaba suavemente los pechos… que reaccionaban a sus mimos…
-Heini…-gemía… sintiendo sus besos…
-Me encanta tu busto… tan firme… pero tan suave y cálido al mismo tiempo…- los succionaba y saboreaba como se saborea un postre delicioso… embestía con lentitud… amándola… sintiéndola en todo su cuerpo…
-Vas a estar conmigo toda la noche…- dijo sensual- estoy hambriento de tu piel y de tus besos…
Afuera, caos, destrucción, muerte, soledad, frío… dentro, calor, sentimiento, sensualidad, erotismo intenso… Heini se entregó entero a Carla… y murmuró enardecido en su oído mientras volvía a embestir suave y lentamente…
-Entrégate… entrégate a mí, liebchen… quiero tu entrega, entrégame tu cuerpo, tu alma, tu corazón….ya te he entregado el mío…- gimió virilmente…
Ella fundió su cuerpo con el de él… ambos llegaron a la cumbre del placer y el cariño… en ese momento deseó dejarle un recuerdo suyo… y lo hizo una y dos veces más…en uno de ellos… dejo sembrada una esperanza…
Fulvia fue a bañarse, perfumarse y esperar que todos estuvieran dormidos… Se moría de los nervios, pero estaba decidida a llevar hasta el final lo que se había propuesto.
Un rato después, Fulvia cruzaba el corredor hacia la habitación de Anthony… entró y cerró la puerta con seguro por dentro…
-Fulvia…
-¿Estás despierto?
-Sí- murmuró… - Te estaba esperando… sabía que vendrías…
Entonces era esa la evidencia que esperaba… era correspondida en sus sentimientos, y como siempre, era la última en enterarse…
-Estás bellísima…-dijo mirándola con admiración…
-Si no quieres… lo entenderé…
-Yo quiero estar contigo… desde que supe como fue el rescate, quería decirte que te amaba… que deseaba tenerte a mi lado en esta cama, que endulzaras el dolor de mis heridas con tus besos… ese beso que me diste en el helicóptero me excitó mucho… tanto que quise que me amaras en ese momento… quería estar contigo… sentir tu cuerpo temblando entre mis brazos…
No había más que decir… Se quitó la batita que llevaba el conjunto. La miró intensamente… como si quisiera traspasar el breve camisón, para descubrir como era su cuerpo… ese cuerpo que sería suyo dentro de poco…
-Quiero levantarme… - dijo- Ayúdame…
Lo ayudó a ponerse de pie… Y el empezó a recorrer con sus manos su cuerpo por encima del camisón… ella temblaba de deseo y excitación… pero el empezó, lentamente a quitarle el collar de perlas que llevaba… poniéndolo en la mesa de noche…
La besó como en el helicóptero, y en sus labios notó un ligero sabor a tabaco habano. Un sabor que se mezclaba con su perfume… Tabaco y Chanel… los aromas del amor… pensó… sensual…
Le quitó el camisón con suavidad, y estrechó su cuerpo tibio contra él… sintió su excitación… le quitó el pijama y la camisa del pijama, miró las vendas que tapaban aquellas heridas… fuera de eso… su cuerpo era hermoso, como una escultura hecha por uno de los escultores más afamados de la Grecia antigua…
-Tiemblas… -dijo quedamente
-De amor… si no lo hago, moriré- gimió.
No dijo nada más… la llevó suavemente a la cama, donde se dejó caer con ella… La metió bajo las sábanas, y lo acarició por completo, ni su sexo excitado escapó de sus caricias…
-Fulvia- gemía virilmente… retorciéndose con cada caricia que le daba… Se recostó contra él… haciéndole sentir su busto, que estaba tan excitado como ella… sus pechos eran volcanes de calor… y estaban sensibles al extremo… El la hizo quedar sobre él, para succionarlos a comodidad y placer… y ella al sentir aquella boca húmeda mimándolos, se excitó más… quería sentirlo dentro de ella, no aguantaba el calor en su vientre…
La colocó fácilmente bajo él y sintió su masculinidad ardiente, excitada, penetrando su cuerpo ansioso, húmedo… que deseaba sentirlo hasta el delirio…
Fulvia sintió sus embestidas, lentas, calientes… se quejaba de placer… el pequeño dolor que sintió al perder su virginidad… era nada comparado con el mar de placer en el que navegaba… temblaba como una hoja…
-¿Te gusta hacer el amor conmigo?- murmuró seductor… mientras succionaba sus pechos…
-Si, Tony… te amo…
-Yo también, tienes el fuego que me habían dicho que tenían las latinas… y me gusta que lo tengas… tienes unos pechos hermosos… y una piel que sabe a miel… y a café…
-Tony… rózame más… quiero sentirte…
Lo hizo… su cuerpo ardía en sus brazos… embestía sensual, ardiente… lento… hasta el delirio… así pasaron casi tres horas… se frotaba contra su piel…
-Te amo, Fulvia… amo tu fuego…
Ella sintió que subía al cielo… todo estalló en una explosión de colores, de luz, si esto era amar… era algo divino… delicioso… increíble…
Se amaron tres veces más… no era noche para dormir… era noche de amor, de pasión, de erotismo… se complementaban totalmente… y era delicioso saberlo.
Cuando dieron las cuatro y media de la madrugada, la despertó un beso sensual y cariñoso…
-Despierta, princesa…-le dijo con cariño.
-Hola, mi amor…-lo besé suavemente…
Se bañaron, antes de regresar a su habitación… tenía una expresión de decisión, no estaba dispuesto a que algo tan bello terminara en un adiós.
-Fulvia… nos tenemos que casar. No pienso que pasar una noche juntos deba terminar con cada uno por su lado. Yo estoy solo, tu también… ¿por qué no unir nuestras soledades?-dijo, tomando sus manos entre las de él.
Fulvia no podía creer lo que escuchaba… el amor de su vida, le decía que no quería dejarla ir, después de la noche tan erótica que habían tenido… le estaba pidiendo que se casaran… después de todo, lo que sus padres querían, que se casara con un hombre de posición social elevada, se cumpliría, pero con un valor agregado, que era la pasión y el amor que se tenían…quizás no tendrían que terminar tan feo, como sus padres… aquello no había sido un matrimonio sino una fría unión de capitales…y todo lo que empezaba mal, tenia que terminar de igual forma, no así ellos.
-¿Estás seguro de que quieres casarte conmigo?
-Princesa, te amo. No podría vivir sin ti, después de lo que acabamos de hacer… No sería capaz de enfrentarme al sexo con ninguna otra mujer, que no fueras tú…Mañana hablaré con Maryland y con Grant, para que me consigan una licencia de matrimonio… de Panamá sales, pero casada conmigo.
Sean debió adivinar los pensamientos de Daniella, pues al terminar el brindis se retiró y ella hizo lo mismo… en ese momento, casi todos se habían retirado a descansar…
La miró con una mirada cargada de significado. La esperaría…Ella entró a su habitación, se despojó de su ropa y entró a la ducha… usó cada cosa que venia en el regalo de Grazia… se enjabonó con ese gel abundantemente… hasta dejar su piel perfumada y fragante… luego se puso la crema humectante que venia en el kit y de último se roció generosamente con el splash… se puso un baby doll corto que había comprado el año pasado para la Navidad… se miró al espejo… Estaba bella, sexy, sensual y también asustada… asustada por lo que iba a encontrarse…
Salí de su habitación y cruzó el corredor para entrar en la habitación de Sean… la luz estaba apagada, salvo unas lamparitas tenues que iluminaban débilmente la habitación… Un aroma a sándalo y especias acarició su nariz… Y él, sin camisa, solo con la venda compresora, que no debía quitarse para nada…
-Ponle seguro a la puerta, para que no nos interrumpan…-dijo con voz cálida y sugerente… estaba sentado en la cama, esperándola.
Ella lo miró… estaba totalmente desnudo… salvo la venda que comprimía su abdomen y tórax… estaba terriblemente excitado… su masculinidad era de un tamaño y grosor exactos… sonrosada, donde se destacaban nítidamente las venas… Daniella tragó en seco ante aquel espectáculo… Se le acercó lentamente, como un tigre dispuesto a devorar a su presa…
Se puso frente a ella… y le quitó la batita que cubría el baby doll que llevaba puesto… sus ojos brillaron…
-Eres el regalo más hermoso que he recibido en Navidad…-dijo mirándola con ternura… una muñeca exactamente como la había pedido…
Sus dedos, con habilidad deslizaron los tirantes de su baby doll, dejando sus senos desnudos ante sus ojos… estaba semidesnuda, y temblaba… ya le faltaba poco, se arrodilló y bañando de besos su vientre, la despojó del pantaloncito… se levantó y dando un par de pasos atrás la miró… estaba totalmente desnuda ante sus ojos…
Se sintió tímida, incómoda, bien sabia que no era una belleza, no era el tipo de muchacha que estaba siempre pendiente de la moda, del maquillaje, del coqueteo, era la típica cerebrito… pero ahora…estaba a punto de hacer el amor con el hombre que amaba…
Sentía su mirada, que la quemaba como el sol… se acerco y puso su cuerpo muy junto al suyo, su pecho casi rozaba sus senos…
-Ven… quiero acariciarte…
La atrajo hacia él…y sintió sus manos recorrerla sin miedo, seguras, sin prisas… sus manos se amoldaron a sus senos, estimulándolos… ella cerró los ojos… y respiró profundamente…
En silencio, suavemente, estimulaba su busto con sus dedos…ella sentía como sus senos se ponían tensos y se esponjaban bajo aquellas manos diestras… sentía humedad en el centro de su cuerpo… lo sintió succionar sus pezones… ella temblaba… estaba haciéndole el amor con lentitud…
Sintió como acariciaba el resto de su cuerpo…y tomaba sus manos para que ella hiciera lo mismo con él a pesar de la venda... ya estaban en la cama, cubiertos con una sábana… Se puso sobre ella, frotando su cuerpo atlético contra el suyo… era muy sensual y apasionado…
-Sean- dijo quejándose…
-Dani… eres justo lo que quiero y deseo en esta vida… te amo… princesa…
Y sintiendo su humedad… penetro suavemente aquel cuerpo… ella sintió un dolor relampagueante… ya había tomado su pureza…
-Ya… tranquila… ya pasó…-dijo arrullándola mientras ella temblaba del dolor…-eres mía… mía, nada más…
Se quedó quieto un instante, esperando que dejara de sangrar…un rato después, empezó a moverse suave y lentamente… su masculinidad la llenaba por completo… y ella rodeó su espalda con sus brazos…
-Dani… -decía extasiado- Nunca…he sido adicto a ninguna droga… pero ahora… voy a ser adicto a ti… a tu manera de amar… te siento tan caliente en mis brazos…-decía moviéndose suavemente… -te deseo… mi amor….
Y se movía, lentamente, besando sus senos y succionándolos… ella temblaba en sus brazos… lo acariciaba, se movía suavemente bajo su cuerpo…
-Estás amándome…-decía sensualmente- siento tu cuerpo moverse contra el mío... –jadeaba- eres increíble… te amo…
El final fue indescriptible… ella quería gritar… pero tuvo que morderse los labios… y él se quejó virilmente…
-Dani… -se quejaba- ayayay… -gemía- te amo… -ohh…ahhh
Se quedó dormido sobre su cuerpo… ella lo contempló… aquella espalda ancha, cubierta de una piel tersa y suave… aquellos brazos que la apretaban, su respiración acompasada… y los latidos de su corazón ya sosegados…
Se quedó dormida por unos instantes, sintiendo el calor de esa piel, hasta que sintió una suave succión en uno de sus senos… era él…
Abrió los ojos… estaba succionando suavemente sus senos… ella se arqueó bajo el y sintió su masculinidad excitada dentro de su cuerpo…
-Sean…-se quejó
-Quiero amarte de nuevo…- gimió. –Una vez no es suficiente para mí…
Lo sintió moverse suavemente, una embestida lenta… caliente… sensual… y su boca tibia succionando su pecho… lo deseaba…
-Dani, mi amor… te deseo tanto…
Sus manos recorrían suavemente su cuerpo… su piel estaba húmeda y exhalaba ese aroma a colonia masculina que la embriagaba… Se pegó más a su cuerpo atlético, sintiendo sus músculos que acariciaban sensualmente su cuerpo tibio…
Así pasaron gran parte de la noche…era un amante insaciable… que sabía como tocar y acariciar… qué decir… al día siguiente, intentó tomar su ropa y salir de la habitación cuando sus brazos la rodearon desde atrás…
-No. No te vas…
-Pero… nos van a echar en falta durante el desayuno…
-No te preocupes…-murmuró contra su oreja- No nos echaran en falta… saben que estoy enfermo y que necesito… descanso… pensarán que estoy dormido… -dijo, rodeando sus senos con sus manos tibias –déjame sentirlos de nuevo en mis manos…-dijo apretándolos y masajeándolos suavemente…
-Sean…
-Vamos a hacer el amor una vez mas… -dijo sensual, besándole el cuello…- me he vuelto adicto a tu piel… a tu cuerpo…
¿Cómo negarse?... no podía… quedó recostada sobre la almohada mientras veía como aquella cabeza oscura quedaba pegada a su pecho… suspiró sintiendo como succionaba suavemente su busto y sentía su masculinidad dentro de su cuerpo… había perdido la cuenta de las veces que había hecho el amor... en todas sentía cosas diferentes…
Jonathan miraba a Grazia… su mirada era inequívoca… al terminar el brindis, se retiraron… y ella fue a prepararse… se sentía nerviosa, aterrada.
Se duchó, poniendo especial cuidado, en su arreglo… no quería estar mal arreglada en su noche… ni hacerlo sentir mal… se puso un splash de baño… se maquilló correctamente… y salió… cruzó el corredor y tocó a la puerta… el abrió…
Estaba arrebatador, sensual, sexy, con esa bata de terciopelo negra que llevaba puesta… y un slip a juego, que más que cubrir, descubría, un torso de atleta, marcado, un abdomen que haría las delicias de cualquier escultor… Grazia, temblaba por dentro…
-Pasa, te esperaba…
Ella entró, él estaba recostado en su cama… en el fondo una música de jazz, ella reconoció a Barry White, el cantautor negro de blues y melodías de jazz que era un icono para los hombres que querían una noche de seducción, sensualidad y por qué no, erotismo intenso… una oleada de calor la sofocaba…
-Estás… bellísima…-dijo con voz ronca de deseo…
Ella no dijo nada, estaba allí, de pie, sin saber bien que hacer… ella no tenia la menor experiencia… y lo que llevaba puesto, predicaba lo contrario… predicaba una mujer sexy, provocativa, erótica… dispuesta para el amor y para el sexo.
Se levantó, y se acercó a ella mirándola a los ojos… y leyó en ellos el temor a hacer el ridículo…
-No amo a la adolescente feúcha que todo mundo humillaba y de la cual se mofaban… amo a la mujer semidesnuda que tengo frente a mi, a la que voy a amar dentro de unos minutos… la mujer que va a ser mía para toda la vida.
Y sensual recorrió con sus manos su cuerpo… por encima del negligé… ella temblaba… sentía como deslizaba los tirantes de sus hombros, cayendo el negligé al suelo… vio como miraba su busto, con gesto hambriento… y vio como se acercaba a quitarle el pantaloncito que venia con el negligé…
-Eres una mujer… hermosa… sensual… deseable…-murmuró con deseo y ardor pasional… - Ven… te voy a enseñar a hacer el amor…
Y la abrazó a todo su cuerpo… el slip negro estaba en el suelo…sintió su erección… y cerró los ojos…
No supo cuando se vio en la cama… sintió sus manos en sus senos, acariciándolos sensualmente… temblaba… la música seguía sonando en el estéreo… de pronto, escuchó un tema en español… y lo miró… era un tema de Ricky Martin… El amor de mi vida…
Ese tema muchas veces lo cantó a todo pulmón cuando nadie la veía… El sin embargo, se lo cantaba cuando estaba acariciándola… y cantándoselo al oído
Hoy veo el sol brillar
Y en mi mente tu recuerdo
Esta creciendo cada día
Para que puedas volver
A encontrarte en mi camino
Y ser el centro de mi vida
Quizás si te propongo
La mágica aventura
De estar juntos para siempre
Que seas quien espera
En cada atardecer
Y una estrella descubrir
y te pueda repetir…
Que eres el amor de mi vida
Me lo dice mi corazón que no te olvida
Ahora tengo una razón para existir para vivir
Y puedo ser feliz, porque ahora se
Que eres el amor de mi vida
Me lo dice mi corazón que no te olvida
Porque tengo una ilusión para compartir puedo decir
Lo que siento es de verdad, uh-uh-uh
Ella lloraba emocionada… era su única locura… su noche de amor… la noche en que concibió una razón para seguir luchando…en un mundo que nada tenia de caritativo, aun sentía la presión de su masculinidad dentro de su cuerpo… caliente… casi ardiendo…
-Grazia… Grazia… te amo, cariño…
-Jonathan… no aguanto tu calor…
-Vamos a estar así mucho tiempo… la noche apenas empieza… voy a amarte hasta el amanecer…
Y así lo hizo… la hizo suya una y otra y otra vez… ella estaba tan débil que… no podía evitar que la hiciera suya…no podía evitar que la amara y frotara su piel ardiente contra la de ella, no podía evitar que sus labios la besaran apasionados, sensuales… no la soltó en toda la noche… la abstinencia había sido muy larga… para ambos…
-Grazia… Grazia… no voy a olvidarte nunca…- me apretaba, sensual… - voy a llevarte tatuada en mi piel toda la vida…
-Jonathan…
La besaba el busto con sensualidad… y ella no aguantaba el calor en su pecho… no aguantaba el fuego de su cuerpo ardiendo dentro del suyo… y la hacia ponerse peor… más húmeda para él, lo cual hacia que el enloqueciera de pasión…
-Eres una alumna aventajada… -murmuraba jadeante- Me gusta tu fuego, tu fiereza para amarme… ah… Grazia mía… - la apretaba… nuevamente haciéndola sentir su virilidad…
En ese juego erótico duraron hasta las seis de la mañana… había cerrado la puerta con seguro… luego de aquello…
-¿Satisfecha?
Se incorporó… cubriéndose con la sábana… eran las seis de la mañana… habían hecho el amor desde casi las diez de la noche…
-Si… satisfecha…
-Me gusta tu fuego…- dijo abrazándola desde atrás…
-Yo creí que no sabía…ser mujer…
-Si sabes… solo necesitabas un hombre que te despertara… -besaba sus hombros…-quédate conmigo, hoy no te dejo salir de mi cuarto… vamos a amarnos todo el día…
Y así, lo hizo… era tan sensual y testarudo como su padre… y ella sencillamente era como un barro moldeable en sus manos…al cual le daba forma…
Estuvieron todo ese día juntos… y los días subsiguientes, era como si una locura amorosa se hubiera apoderado de ellos… Ninguno sabia parar… ninguno le ponía freno al fuego que los consumía… bendito fuego purificador… que todo lo transformaba…
Sonia y Richard se retiraron temprano… Ella se preparó para ir a la habitación del hombre de su vida… si, por que así era… Se duchó, y puso la crema que venia en el kit y el splash… ya bañada y perfumada, se puso un baby doll que había comprado hacia dos navidades, con los primeros salarios que ganó como Casco Alado… Y ya arreglada, fue a ver a su amante.
Cruzó el corredor vacío a esa hora de la noche… y toqué tímidamente la puerta de la habitación de su hombre… El abrió la puerta. Estaba vestido con un batín azul de satén y terciopelo… a medio abrir… estaba sexy, sensual y apuesto…
-Te esperaba… pasa…
Entró en la habitación, estaba preparada con velas blancas con aroma a vainilla… Se acercó a ella… que temblaba… una suave música salía de un estéreo…era un bolero antiguo, muy conocido en Colombia…
Yo siento que me provocas
Aunque no quieras hacerlo
Esta grabado en tu boca
Al rojo vivo el deseo
Y casi puedo tocarte
Como una fruta madura...
Presiento que voy a amarte
Más allá de la locura...

*CORO*

Voy a comerte el corazón a besos
A recorrer sin límites tu cuerpo
Y por el suelo nuestra ropa
Suave gota a gota
Voy a emborracharte de pasión.

Voy a comerte el corazón a besos
A recorrer sin límites tu cuerpo
Voy a dejar por tus rincones
Pájaros y flores
Como una semilla de pasión.

Aquella canción describía muy bien lo que sentíamos el uno por el otro… Sintió su beso en los labios, un beso apasionado… un beso preludio a lo que vendría después…un acto hermoso, que sellaría un pacto de amor para la eternidad…
Sintió sus manos, acariciándome… y ella deslizó de sus hombros la bata que lo cubría… no sabía bien lo que estaba haciendo… pero si sabia a dónde quería llegar. Al contemplarlo así, desnudo, no pudo evitar un escalofrío de temor, y vaciló, pero recordar aquellos días en casa de su padre, las Navidades, en que el único regalo que tuve fue un bofetón que me sacaba sangre de la boca, y por ultimo aquel día en que ciega de dolor y harta de sufrir malos tratos, se convirtió en una justiciera, que cobró a sangre y fuego todo lo que le hicieron, le dio valor para dejarlo quitarle el baby doll, y lo hizo con dedos suaves, hábiles, tan sensitivos como sus caricias…
-No soy una modelo…pero esto es lo que tengo- dijo con voz temblorosa, al verlo mirar su desnudez.
-Eres hermosa…-murmuró- y más por que eres mía.
Su cuerpo se acercó al suyo, con suavidad…tiernamente… lo abrazó… y sintió el latir de su corazón, en su pecho… sintió ganas de llorar… no entendía lo que le pasaba… y su piel estaba tan caliente y tan suave al tacto…
-Sonia…
La cargó en sus brazos y me llevó a la cama… allí, la cubrió con la sábana y se metió él… Sintió su piel tibia, acomodarse a la suya… y sus besos en la boca…
-Richard…
Suave, sensual, la fue acariciando toda… y cada caricia iba con un beso tierno… toda su piel quedo bañada con sus besos… ella temblaba, apasionada… quería sentirlo… quería amar… amar hasta perder la razón. Sentía sus labios en su busto… enmarcándolo, llenándolo de calor y emociones… apretó la almohada…
-No aguanto…
El, por su parte, sentía más que ella… al terminar su dulce recorrido la hizo quedar sobre él… para saborear a placer su busto… ella sentía calor en todo su cuerpo… ya quería sentirlo dentro de sí… estaba desesperada…
Parecía que no iba a acabar, cuando sintió que la ponía bajo su cuerpo, y la rodeaba suavemente con sus brazos, acomodándose entre sus muslos… y sentí como su virilidad, penetraba tierna y suavemente en su cuerpo… sintió un pequeño dolor… pero no fue nada comparado a lo que sintió después…
Diestro, sensual, tierno… la llevó a las estrellas… ella sentía calor en su vientre… sintió aquellas embestidas… calientes… temblaba… sus dedos se enterraban en su espalda, su boca estaba sobre su busto, estimulándolo hasta casi doler…
-Te amo, muñeca… -murmuró tiernamente al sentir que se estremecía con sus movimientos…
-Yo también… te amo…-gemía, casi a punto de gritar…
Se amaron toda la noche… una y otra vez, éran dos amantes insaciables, ardientes, entregados el uno al otro... incluso al amanecer, que los sorprendió amándose… ella no sabia controlar su deseo, y el tampoco…
Al despertar al día siguiente, el la retuvo en sus brazos…
-Quédate conmigo… -murmuró- Quédate conmigo… al menos tres días… no quiero separarme de ti…
¿Cómo resistirse? No podía hacerlo, el calor de su cuerpo, la suavidad de su piel, y su forma de amar… eran irresistibles… y se quedó esos tres días encerrada en su habitación… dejándome llevar por sus pasiones reprimidas…
Esmeralda y Carsten siguieron el brindis con champagne…igual que los otros. Un champagne que ellas le supo amargo, sobre todo a Esmeralda… en ese momento él le sugirió, hablándole al oído.
-Retirémonos temprano para poder prepararnos… ¿Qué música te gusta?
-Me gusta la música romántica… tanto en inglés como en español.
-Algún cantante preferido…?
-Es un venezolano… no es Franco de Vita, ni Ricardo Montaner… es uno poco conocido… solo tiene tres temas de fama… Marea de la Mar, que fue tema de novela y Locos de Amor… Se llama Ilan Chester. No se si lo habrás escuchado.
-Hay una canción de él que me gusta… se llama Dímelo… ¿Te gustaría que la pusiera? La tengo en mi discoteca personal.
-Si, me gustaría… -asintió… - y de las baladas en inglés… Air Supply, Here I am… o can’t fight this feeling anymore…
-También son mis favoritos…-sonreí…
Nos retiramos a nuestras habitaciones, él busque la música que su amada le pedía y se esmeró para que la noche saliera tal como la quería… muy lejos de imaginar el placer que le esperaba… que una mujer ingenua podría darle, por que solo iba a obtener lo que su corazón sentía…
Buscó entre sus discos todo lo que fuera romántico… de las baladas en español estaba la que le pidió ella y otra más… tenia una sorpresa… a mi me gustaba mucho escuchar a José Luís Rodríguez… sobre todo algunas canciones que tocaban especialmente mi alma… sobre todo Atrévete… crucemos el Jordán… y también me gustaba escuchar a Basilio… el cantautor panameño de ascendencia afroantillana…
Se preparó a conciencia… se bañó y afeitó… se puso colonia, y puse sobre su cuerpo hirviente una bata de terciopelo y satén blanca que le regaló Wilhemina… cuya muerte aún me espanta… una muerte sin sentido, injusta en extremo, solo por el hecho de ser periodista… Con ella murió un periodista español de la cadena EFE. Juan Rodríguez, conocido en el mundo periodístico como Juantzu. Uno de los muchos mártires de la libertad de expresión.
Ella por su parte, se arregló a conciencia… se duchó con el regalo que le habían dado la navidad anterior y se puso lo que él le regaló… por ultimo se maquillo un poco, ya que el color negro la hacía verse pálida… al mirarse al espejo, la imagen que le devolvió fue la de una mujer sensual, provocativa… ardiente aunque ella no supiera bien que era lo que iba a hacer…
Tocó la puerta de mi habitación… abrí… al verla sintió una oleada de calor por todo su cuerpo… se había arreglado para él
-Hola…-dijo sonriéndole provocador- la esperaba…
Tímidamente entró… miró la habitación y ella aprovechó para cerrar la puerta y colocarle el seguro por dentro… La miró… y yo con un movimiento suave, dejó caer la bata que tenía puesta, dejando expuesto mi cuerpo hirviente de deseo… ella al mirarme… se acercó y me abrazó con suavidad, en silencio… sus mejillas se apoyaron en su pecho…
-Esmeralda…
-Quédate quieto…- murmuró- quiero sentir tu cuerpo… tu piel…
La respiración de ella era fatigosa… era como si estuviera reprimiendo los deseos que estremecían su cuerpo de niña tierna y dulce… mis manos acariciaron su espalda, la tela de satín y su trasero… cubierto solo por un breve pantaloncito.
Le fue quitando con suavidad las prendas que llevaba, era como si estuviera desenvolviendo un regalo…. Un regalo hermoso… al fin quedó desnuda ante sus ojos hambrientos y ardientes… tenia un cuerpo divino…
-Soy fea, ¿verdad?- dijo con timidez…
-No, cariño… no eres fea…- dije apretándola en mis brazos… tenia una piel suave, un cuerpo de curvas suaves, y un busto suave, turgente…
La besó profundamente en los labios… sintió un suspiro, sintió sus brazos alrededor de su cuello y las curvas suaves de su cuerpo que se acomodaban en el de él… siempre había sido un hombre sensual, diestro a la hora de hacer el amor y compartir pasión y deseo… ella por su parte dejaba sueltos sus instintos…
En silencio, quedaron en la cama… ella tocaba todo su cuerpo con suavidad, pasaba sus manos por sus brazos, hombros, pecho, abdomen, y sexo… él temblaba de deseo… pero la dejó hacer… al fin y al cabo era completamente suyo… en cuerpo y alma…
Sus labios siguieron a sus manos… que me torturaron deliciosamente… él se estremecía de placer… ella lo estaba amando aun sin tener la menor experiencia… se estaba dejando llevar de lo que sentía en su interior…
-Esmeralda… -se quejaba virilmente…- estaba hirviendo de deseo… ya quería tenerla unida a su cuerpo…
En ese momento, se incorporó… me cubrió con la sábana y se acercó a su cuerpo…
-Hazme tuya… - dijo, en sus ojos había cansancio y estaban velados por el deseo y la lujuria que sentía…
Lo hice… estaba enormemente excitado… la encontró suave, húmeda, caliente… y penetró con suavidad… poco a poco… mientras saboreaba su piel… la sentía estremecerse… succionó sus pechos… y la sintió enredar sus dedos en su cabello… a pesar de llevarlo corto, como corresponde a todo marino…
-Te amo- murmuré.
-Yo también… gracias por hacerme tuya… por enseñarme que la pasión no se esconde… se vive…
Y la sintió mordisquear mis hombros… suavemente… era una mujer sensual… se lo demostraba, mientras succionaba sus pechos, se movía dentro de ella y ella respondía apretándolo contra ella, moviéndose suavemente con él… amándolo… apretándolo dentro de ella… acariciándolo
Duramos en ese juego erótico muchas horas… el final fue hermoso… ardiente… ella apretaba la almohada y yo sobre ella, tenia agarrados sus brazos y la besaba en el cuello moviéndome… sensual…
-Carsten… te amo… -gimió al sentir que su semen le llenaba por dentro…
-Yo también….-gimió sintiendo como su esencia vital se mezclaba con la de ella, para tal vez darle vida a un nuevo ser que los uniría para siempre…
Se adormilaron sin moverse de sus posiciones… él estaba cubriéndola con su cuerpo y ella había ladeado su cabeza, asomando esta por uno de sus hombros… En el fondo escuchó la canción que seria el himno de su amor…

Dónde estas que no te veo?
pareces estar escondida para no verme mas.
Si lo nuestro quedó en el olvido, dímelo.

¿Dónde estas que no respondes?
pareces haber encontrado una forma nueva de amor
si lo nuestro es un juego de niños, dímelo, dímelo.

Si no encuentras en mi lo que tanto anhelabas.
Si te faltan las ganas de verme otra vez, ¡OH no!.
Si lo nuestro ya esta decidido, dímelo, dímelo.

¿Dónde estas que yo te espero?.
A ver si quedamos en algo, en amantes, amigos, quizás.
Si lo nuestro ya esta decidido, dímelo, dímelo.

Si no puedes decir ni una sola palabra.
Si el errar es humano quisiera saber, ¡OH no!
Si lo nuestro es un caso perdido, dímelo, dímelo.

Si no encuentras en mi lo que tanto anhelabas
Si te faltan las ganas de verme otra vez, ¡OH no!,
Si lo nuestro es un caso perdido, dímelo, dímelo.

Dímelo (dímelo, dímelo dime)
Dímelo, dímelo (dímelo, dímelo dime)
Dímelo, dímelo, dímelo, dímelo.

El empezó a cantársela acunándola en sus brazos… ella despertó y lo miraba, su mirada estaba cansada… de tanto amar… por que se habían amado con lujuria, pasión, desenfreno… nunca las mujeres que tuvo se me habían entregado así, como ella… no solo me dio su primera vez… sino que dejó tatuada en su piel el tacto de la suya, marcado su cuerpo con sus curvas y sobre todo… su corazón pedía quedarse con ella… para siempre…
Se amaron mucho más, esa noche… una noche de pasión, amor y cariño que nunca se le olvidaría… al amanecer, ella intentó levantarse, para tomar su ropa y volver a su habitación, pero no la dejó volver… se quedó encerrado con ella todo ese día, y el día siguiente, y el día que siguió… casi tres días que no la dejó irse de su cuerpo ni de su piel… y ella lo complació en todo lo que le pidió
Mike y Delia se retiraron en silencio… fue en ese momento que ella comenzó a prepararse para su noche junto a el.
Se arregló a conciencia… quería estar hermosa esa noche, agradarle, sería una mujer tierna… aunque no supiese siquiera como hacer más de cuatro cosas…
Se vistió con el teddy que le regaló, no sin antes rociar generosamente mi piel con un splash que me habían regalado… y salio a buscar a su amor…
El estaba en su habitación, llevaba puesta una bata azul marino de satén que le había regalado Wilhemina, cuyo recuerdo estaba vivo en la memoria de todas, ya que a pesar de haber sido su antagonista, no era una mala mujer, sencillamente era una chiquilla consentida a la que sus padres nunca le pusieron freno… y más por que ella le dijo a Daniela, que cuidara de su hermano Sean…
-Hola…-dijo, mirándola de arriba abajo como se mira un pastel delicioso… -te esperaba…
-No me he tardado demasiado…
Entré en su habitación… esta estaba arreglada conforme lo que íbamos a hacer… tenia velas aromáticas, canela, vainilla y clavo de olor, especias que acariciaban su nariz… y una vela con aroma a miel quemada.
Se acercó a la cama… y esperó… el se me acercó por detrás… la besó en la nuca.
-Hueles rico… -murmuró… y se pegó a su espalda… sentí su pecho, tibio, musculoso… empecé a temblar…
Me hizo volverme hacia él… y me apretó suavemente a su cuerpo… sentí de nuevo aquel aroma a Agua Brava… que combinado con su aroma natural… ponía su corazón en jaque…
-No se nada de esto… no sé por donde empezar…
-No te preocupes…nadie nace sabiendo… -y apretándome más contra él… murmuró- eres tan suave…- y lo vi echar la cabeza hacia atrás… era un tipo sensual y lo demostraba…
Sentí como la camisola del teddy caía a mis pies… y sentí el calor de su pecho en mi busto… y su boca besándome suavemente en los hombros… lentamente…
-Mike… -dijo con voz temblorosa…
-Delia… querida… -gemía… y sintió como el pantaloncito del teddy se unía a la camisola… estaba desnuda… tal como el quería… y sintió como la ponía sobre la cama…
-Vamos a amarnos…-dijo él… - hasta el amanecer…
Y empezó a hacer un viaje que le resultó torturantemente sensual pero también placentero… empezó en su rostro… cubriéndolo de besos… luego su cuello… ella apretaba la sábana… era demasiado…
Sentí sus labios en sus senos… cubriéndolos con su boca… succionando, saboreando cada centímetro de su pecho…
-Mike… -suspiraba, desesperada…- Mike…
-Sabes a bombón… a crema de vainilla azucarada… me vuelves loco, Delia…
Ese viaje continuó por todo su cuerpo…no hubo nada que su boca ardiente no explorara… la devoró completa… y la instó a que hiciera lo mismo con él… desde su rostro hasta la punta de sus pies…
-Delia- gemía virilmente- así, amor… devora mi piel con tus besos… así…
Ella torpemente, hizo lo mismo que él… deslizo sus labios por todo su cuerpo… y lo sintió… vibrar… incluso cuando sus labios tocaron su sexo… que reaccionó completamente al calor de su boca…
-Delia… mi amor… sigue… tortúrame… -gemía virilmente…
Al terminar, la bajo su cuerpo y lo sintió dentro de ella, un dolor pequeño, casi imperceptible… se hizo presente… pero ambos estaban demasiado excitados… Sintió que la llenaba con su tamaño… y sintió el calor de esas embestidas…
-Ámame, Delia… ámame… - gemía virilmente, besando mis senos…
Apretaba su cabeza en su busto… lo sentía, y su cuerpo se movía con él… eran movimientos suaves…pero angustiantemente placenteros… yo temblaba como una hoja…
-Así, así… -gemía- Así…suave… calida… siento tanto placer al amarte…- seguía besando su busto…
Un orgasmo simultáneo, los estremeció… a ambos… y los hizo dormirse casi al instante…
Un rato después, sintió sus manos acariciándola… eran las cuatro de la mañana…. Había dicho, que estarían juntos hasta el amanecer…
-Delia… tienes un cuerpo hermoso…
-Tu también…
-El día que Billie nos tomó aquella foto, quería estar a solas contigo para acariciar tu piel… ahora lo estoy haciendo…- sentía sus manos rodeando sus senos… acariciándolos suavemente, estimulándolos… ella cerró los ojos… entregándose a sus caricias…
Se amaron una vez más… esta vez, ella cooperó… lo acarició suavemente... se movió suavemente, acariciándolo dentro de ella… escuchaba sus gemidos viriles…
-Delia… eres tan sensual como yo… me vuelves loco…
-Rózame con suavidad, quiero sentir cada centímetro de ti…
Ella no supo, en qué momento concibió a Dylan Richard, pero si supo que todo ese descontrol fue más allá del amanecer, por que casi la tuvo retenida en su habitación durante tres días… tres días que se amaron intensamente… había heredado los sentimientos y la manera de amar de su padre…Y no tenia por que ser de otra manera…
Bryan y Ariadna se retiraron y ella se preparó para ir a mi habitación él a preparar la habitación para estar con ella. Siempre fue un hombre ordenado, pero esta noche, quería que fuera algo especial. Unas velas aromáticas, música suave… romántica… Se bañó y puso colonia y el batín negro con el boxer. Estaba más atractivo que nunca…y lo sabía. Pero también temeroso de un rechazo.
Unos suaves toques en la puerta me alertaron. Era ella se dirigió a abrir la puerta. Y allí, estaba… Nunca en mi vida la vio tan hermosa como en ese momento…
-Hola- dije sonriéndole provocativamente- te esperaba…
Entró… miró alrededor suyo y aspiró el aroma a especias y a café que despedían las velas… Se acercó por detrás y la abrazó suavemente… besándola en la nuca…
-Al fin, solos. –dijo sensualmente…
Ella se volvió en sus brazos… la miró… y vio en sus ojos miedo, pero también curiosidad por saber que haría. Deslizo un tirante del baby doll fuera de sus hombros… sentí su suavidad apoyada en mi pecho… eran senos firmes… tentadores… cubiertos de piel canela suave, tentadora… fragante… Y deslicé el otro tirante… con un suspiro… Desenvolver el regalo hermoso de un cuerpo femenino…
Ella no sabia que hacer… y deslizó suavemente el batín de mis hombros… descubriendo mi pecho y el boxer que ocultaba mi mortificada y erecta virilidad… su peso y su dureza ya empezaban a desesperarlo. Terminó de quitarle el baby doll, dejándola con sus braguitas puestas… aquella visión lo puso peor… ella me quitó suavemente el boxer… y dando un par de pasos atrás lo miró. En ese momento el se acercó y le quitó las braguitas…. Sintió aquella piel suave, cálida fundirse con la suya.
-Te amo, mi amor… -dijo con voz ronca
-Eres tan hermoso…- dijo ella con voz temblorosa – casi no puedo esperar…
-¿a qué, mi bien?- dijo mirándola sensual y provocativo.
-A ser tuya en cuerpo y alma- dijo con igual tono de voz… -Ámame, Bryan, hazme olvidar esta pesadilla, por favor- sollozó desesperada….
¿Cómo resistirse a una suplica así? La cargó en sus brazos y la puse sobre su cama… la cubrió con la sábana y el cobertor… y se metió a su lado, envolviéndola con sus brazos… besándola apasionado en los labios, ella devolvió todos los besos que le dio… su piel se fundía con la de él de una manera suave y sensual… casi creyó perder el sentido al sentir todo su cuerpo en el de él
Siempre fue un hombre apasionado al amar… las pocas enamoradas que tuvo desde su ingreso en la Marina, no lo olvidaban fácilmente, a pesar de que continuaban siendo buenas amigas, después que terminaba su relación con ellas, pero eran mujeres maduras mentalmente y emocionalmente, que reconocían cuando la relación terminaba… no así la amistad. Con Ariadna, era diferente, a esta no la iba a dejar nunca, y donde fuera su recuerdo lo perseguiría como una sombra, era la mujer con la cual quería vivir el resto de su vida… con la que quería tener hijos y formar un hogar… parecido al que tuvieron sus padres. Un matrimonio por amor y de amor hasta el último de sus días…
Sabia que su amor era una mujer virgen… y no quería asustarla, ni incomodarla. Refrenó un poco su apasionamiento… comenzó con suaves caricias por todo su cuerpo… No hubo rincón que no acariciara… la sintió quejarse… eran cosas nuevas para ella… y así lo entendió.
-¿Te estoy lastimando, Ariadna?
-No.- suspiró- Tus manos son tan suaves…
-Tienes una piel que da gusto tocar y acariciar…parece terciopelo…
A sus manos, siguieron sus labios, recorriendo el mismo camino… la sintió agitarse, al contacto de sus labios en su piel… pero estaba dispuesto a compartir con ella cada parte de su cuerpo…
Al terminar su dulce recorrido, la animó a que hiciera lo mismo con él quería compartir su cuerpo con ella… y lo hizo... aunque ella tenia miedo de lastimarlo…
Bryan sintió sus manos en todo su cuerpo, incluso en su sexo, que ya empezaba a mortificarlo … esas caricias inocentes, pero cargadas de amor y ternura… Y sintió un placer increíble con sus caricias… la miraba… tiernamente… se bebía su figura, adoraba sus curvas… viviría enamorado toda la vida de ese cuerpo tierno, sensual… no habría otra mujer que hiciera sus sentidos reaccionar…
Sus labios lo llevaron al cielo, al sentirlos recorrerlo, creyó que no soportaría una tortura sensual como esa… apretó la sábana… su sexo excitado y erecto pedía a gritos que esa tortura acabase…
Al fin, terminó… y se recostó a su lado, sus ojos negros brillaban… y todo su cuerpo temblaba… Se acercó y se colocó suavemente sobre ella… envolviéndola con sus brazos…
-¿Lista?- preguntó con voz ronca.
-Lista… no aguanto más… Bryan…
Se colocó suavemente entre sus muslos… se levantó un poco y fue penetrándola lentamente, no quería lastimarla… Quería que se llevara un recuerdo hermoso de la única noche de amor que tendría…
-Te amo… -gimió al sentir sus tejidos húmedos rodeándolo
Ella no decía nada… solo rodeaba sus hombros con sus brazos… fue penetrando lenta y suavemente… el calor de su interior era algo celestial… se detuvo un momento… para deleitarse en ese calor… ya faltaba poco para llenarla completamente con su sexo. Entonces… escuchó la petición más hermosa que pudieron escuchar sus oídos.
-No me importa el mundo, ni lo que diga la sociedad… hazme un bebé, Bryan… hazme un hijo… por favor… -sollozó.
-Me salvaste la vida más de dos veces…- dijo con voz ronca de deseo y pasión- y ha sido por amor… hoy vas a saber que el amor que me diste, con amor te lo pagué… Amor, con amor se paga, Ariadna mía… y si, te daré el bebé que me pides.
Sus labios cubrieron los suyos… y terminó de penetrarla, la llenó completamente… y comenzó a moverse suave y lentamente…rozándola sensual por dentro… y ella apretó los muslos alrededor de sus caderas… despegó sus labios de los de ella y besó suavemente su busto… se le antojó deseable, con sabor a crema de vainilla azucarada y chocolate blanco… la sintió estremecerse con sus besos… la sintió rodearle la espalda, sus manos se dirigieron a sus glúteos, apretándolos y moviéndose contra él… se amaron apasionada y sensualmente… y al final, cuando ninguno de los dos sabía donde empezaba la piel de uno y terminaba la del otro, un orgasmo simultáneo, en el que sintió que tocaba el cielo con las manos… los hizo estremecer…
-Te amo- dijimos al unísono… mirándose a los ojos…
Un rato después… ella despertaba acurrucada en sus brazos…
-Hola, princesa…-dijo sonriéndole sensual.
-Hola… - dijo frotándose los ojos -¿Descansaste bien?
-Como un bebé…-dijo provocativamente, la sujetó más contra su pecho… No iba a dejarla ir tan pronto, solo eran las tres de la mañana…
-¿Te gustaría quedarte conmigo todo el día?
-¿Mañana? –dijo mirándome sorprendida
-Si, no quiero que te vayas tan pronto… quédate conmigo hasta el lunes…
Y se quedó… Se amaron durante tres días… con furia, pasión, deseo… y Bryan supo complacerla como mujer… pagó uno a uno los riesgos que tomó para salvar su vida, con su cuerpo, sus caricias y sus besos… con los cuales dieron vida a la mas hermosa esperanza que puede tener un corazón herido.
EN LA TERRAZA DEL EDIFICIO, JUSTO EN EL SOLARIUM…
Una figura estaba apoyada en el barandal del Solarium… era Alicia… las lágrimas corrían por sus mejillas…
-Tanto luchar… para que nuestro país quedase en democracia… para terminar… así… No nos merecíamos esto…
Ni siquiera se dio cuenta que otra figura apareció en ese mismo momento, detrás de ella… un par de botas negras, vaqueras… pantalón negro y una correa que comenzaba en una hebilla… de plata… una camisa negra, que ocultaba un torso musculoso…
-¿Por qué tan sola-...?- escuchó tras ella una voz sensual, sexy, que hizo que su corazón se acelerara… Se volvió, y lo miró. Era Naoko.
-No pensé que estuvieras despierto a esta hora… pensé que estarías dormido…
-No es noche para estar durmiendo- dijo acercándose peligrosamente a ella…
-Lo sé, anoche Maryland me dijo que las reglas a las que estuvimos sometidas todos estos años estaban suspendidas desde esta noche…
-¿Sabes lo que eso significa?
-Si… Pero… no creo que esté preparada para… eso.
-Alicia… mi amor… lo necesitamos… hemos visto demasiado terror… demasiado dolor… demasiada desgracia. Lo necesitamos…
Sus brazos la rodearon, y sus labios capturaron la boca de Alicia… fue un abrazo urgente… tierno, que demostraba el deseo que sentía por ella.
-¿Estás seguro de que eso es lo que quieres?
-Tu eres el amor de mi vida… no hay ni habrá nadie que te reemplace en mi vida y en mi corazón…
Y se la llevo hacia su habitación… esa noche… solo serían testigos… la estrella de Belén… y la luna, que relucía en el firmamento…




Brujita Alex
Aprendiz de bruj@ Senior

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Fecha de inscripción : 09/09/2012

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